Este martes se realizan los alegatos, en diez días habrá sentencia.
La familia de Analia Rivero amaneció en tribunales, la carpa de acampe de los amigos y militantes sociales espera justicia desde el 8 de marzo cuando comenzó el juicio y empezaron a desfilar los acusados y los testigos. El veredicto está cerca y la expectativa crece. En diez días se sabrá qué pena le cabe a los acusados del homicidio que sacudió al cordón industrial. La vida de una inocente que se la llevó una trama de violencia y de narcotráfico.
El abogado de la familia Rivero, Norberto Olivares, pedirá penas de 25 años para Iván Galarza y de 23 para Brian González, mientras que la fiscalía pedirá 21 y 19 respectivamente. Hoy las partes realizan sus alegatos, luego habrá que esperar alrededor de diez días para conocer la sentencia final del tribunal a cargo de la jueza Griselda Strólogo.
En la última audiencia, el jueves, declararon cinco testigos, entre ellos tres inspectores de tránsito, un perito criminalístico y Dina Olmedo, joven que viajaba en la Toyota Hylux de la que salieron los disparos. Esta joven declaró que quien disparó fue Galarza, desde la parte de atrás de la camioneta, profundizando la teoría de la querella sobre que Iván fue quien disparó. Cabe recordar que Olmedo fue condenada a tres años y seis meses de prisión, en un juicio abreviado a fin del año pasado, donde admitió su rol como encubridora.
Una de las declaraciones más fuertes que escuchó la familia Rivero fue la del médico forense que realizó la autopsia al cuerpo de la joven asesinada y la de los peritos que realizaron la reconstrucción del hecho.
Respecto a este día, Mónica Rivero dijo: “es muy difícil, pero por mi hija estoy dispuesta a enfrentar todo. Tengo mi alma destrozada, pero mi hija lo vale todo. Solo quiero que los que me robaron la vida de ella paguen, sé que mi hija no va a volver, pero sí podemos hacer Justicia, es lo mínimo”.
