El concejal socialista presentó un proyecto de declaración mediante el cual manifestó su profunda preocupación por la decisión unilateral de gobierno nacional de quitar subsidios al transporte “la medida afecta directamente a la ciudad de Rosario y al normal desarrollo de las actividades cotidianas de los ciudadanos que utilizan el transporte urbano de pasajeros, sobre todo a quienes lo utilizan como único medio de movilidad”, se lamentó
El concejal Horacio Ghirardi manifestó su preocupación y oposición a la eliminación unilateral de subsidios al transporte urbano de pasajeros por parte del gobierno nacional por “la incidencia negativa directa que la medida tiene sobre las arcas minicipales y sobre la población de la ciudad de Rosario”.
La eliminación de subsidios nacionales representa para el sistema transporte urbano de pasajeros de Rosario la perdida de 80 millones de pesos mensuales”, preciso el edil socialista. A la vez denunció que “el gobierno nacional seguirá recaudando el impuesto a los combustibles líquidos, que se encuentra afectado al financiamiento de los subsidios al transporte, pero no los distribuirá”. “Es una decisión unilateral del Ejecutivo Nacional, sin tener en cuenta la falta de posibilidades tanto de las provincias como de los municipios para afrontar esa carencia de recursos”, se quejó Ghirardi.
El concejal socialista recordó que el transporte urbano de pasajeros en Rosario cuenta con subsidios locales, ejecutados tanto a través del presupuesto como del Fondo Compensador del Transporte.
En ese sentido, Ghirardi preciso que “la Municipalidad de Rosario incrementó este año un 57% el Fondo Compensador del Transporte, destinado a garantizar la calidad del servicio y a minimizar la incidencia de los aumentos de costos sobre los usuarios” y que ese incremento representa “un aporte total de 548 millones de pesos anuales desde las arcas municipales”. A su vez, la provincia de Santa Fe también aporta recursos en materia de subsidios a la ciudad de Rosario.
Por último, el concejal Ghirardi advirtió que “la situación es realmente preocupante porque el contexto de aumento del dólar, el incremento de combustibles y la inflación, producen un incremento de los costos del sistema de transporte”.
En este marco, agrego que quitar los subsidios nacionales al transporte también significa una mayor presión económica sobre la población. “El transporte debe entenderse como un derecho que el Estado tiene que garantizar y no como un gasto que puede ser recortado”, aseguró.
